Todos nos hemos roto alguna vez emocionalmente; o por lo menos todos hemos vivido muy de cerca algún tipo de “ruptura” personal , por lo que sabemos lo que es y cómo se pasa…
Cuando se dice que una persona está rota, puede ser por diversos factores. En mi opinión, los principales son los siguientes:
- Pérdida de algún ser querido
- Amor no correspondido
- Ruptura inesperada de amistades
- Decepciones de amigos/familiares
A lo largo de mi vida, he tenido la suerte de vivir estos cuatro últimos casos… Aunque no voy a hablar de cada uno de ellos ya que si no no acabaría nunca. Pensarán que estoy loca al decir “suerte” en lugar de “ desgracia” ; pero soy de esas personas que cree que es necesario equivocarse para aprender, sufrir para fortalecer . Desde mi punto de vista, este es el único método que realmente te ayuda para llegar a ser una persona grande.
Pase lo que pase, por muy grave que sea el motivo por el que estemos rotos debemos de levantarnos, seguir adelante, abalanzarnos sin miedo sobre la primera página de un nuevo capítulo de nuestras vidas, encararnos frente al futuro con una sonrisa en la cara, con ganas de vivir, de aprender de la vida y de las personas que formen parte de ella…
A algunos les resulta más fácil encontrar las luces del camino a seguir cuando se está perdido, a otros, nos cuesta más pasar página y emprender una nueva ruta por miedo a lo desconocido; pero cuando no hallemos esas luces en lugar de rendirnos, debemos buscar la manera de conseguir encender una vela, y continuar luchando. Cuando no podamos volar, corramos. Si no podemos correr, caminemos. Si no podemos caminar, arrastrémonos, pero continuemos avanzando. En la cima habrá un sitio esperándonos junto a los mejores.
Creo que lo fundamental para seguir adelante, a parte de las ganas de uno mismo y del tiempo que obviamente nos ayudará; es el apoyo de las personas más cercanas : amigos y familiares. Juegan el papel más importante de nuestras vidas, ya que la compartimos con ellos. Hay que aprender a valorarles, cuidarles, y sobre todo, a quererles. Desgraciadamente, no todo el mundo es capaz de querer y de saber ser amigo .
He de decir que todo lo que he conseguido reparar en mi vida ha sido en gran parte gracias a esas personas que siempre me han apoyado y que ocupan gran parte de mi, y si soy la persona que soy ha sido gracias a lo que me ha aportado cada uno de ellos…
En conclusión, para mi , la vida es un reto. Un reto que nos pone a prueba para conocer nuestros límites. Para repararse a uno mismo, no hace falta olvidar, ya que, a parte de que para esto último deberíamos de tener alzhéimer, algunas huellas son imborrables. Lo que siempre es posible es reparar, no lo olviden.
No vale la pena no sonreír, porque la vida no es más que un largo viaje que nos ayudará a crecer .
Porque cada dolor te hace más fuerte, cada traición más inteligente, cada desilusión más hábil y cada experiencia más sabio.
Carpe Diem
- Maica Fernández Colomé-